Hooola! ¿Tenéis por la casa de vuestros abuelos unos "horribles" sillones de skay?
Si es que sí, primero comprobar que la estructura de madera está bien: que tenga las cuatro patas -eso es básico- que los brazos no estén desencajados, etc. Y si es así estáis de suerte. Os muestro un vídeo de como una simple funda cambia radicalmente un sillón.
La tela tiene que ser resistente, gruesa y que se pueda lavar en la lavadora. También necesitaréis velcro y máquina de coser por supuesto. Primero tomar medidas y hacer "croquis" del futuro patrón (que podríais realizar con papel de periódico enlazado) ó sino, en las papelerias podéis comprar papel blanco para patrones. Añadir 3cm a la hora de cortar la tela (1 cm para la costura aprox. y 2 de margen, para poder rectificar). La espuma del cojin del asiento mejor cambiarlo. Comprar espuma de alta densidad con las medidas que necesitemos ó si compramos una pieza estandar de mayor medida, con un cutter y mucho cuidado podemos recortar la espuma para que encaje en el asiento. El cojín tiene que entrar muy justo para que quede bien.
Un truco, la tela de la funda del asiento podría ser "más atrevida" y que contrastara con la tela del sillón, que mejor que sea lisa.
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